A través del tiempo, el mundo ha visto diferentes tipos de eventos nacionales o mundiales que impactan de manera positiva y negativa las economías. Esto a su vez se reflejan, en los mercados financieros; sin embargo, lo que regularmente recordamos son los eventos negativos.

El origen de los ajustes o caídas en los mercados es diverso. Los mercados de valores se anticipan a crisis de distintos tipos (industriales, servicios, salud, políticos, financieros, etc.). Esto sucede cuando los inversionistas identifican que las empresas en las que han invertido dentro de las bolsas de valores, dejarán de ganar o crecer durante los meses siguientes. Por lo tanto, retiran sus inversiones buscando proteger las ganancias obtenidas en el pasado. Cuando las salidas son generalizadas, los impactos se dejan ver de manera agresiva, y los primeros en salir asumirán el menor costo, es por eso que se convierten en salidas de pánico.

Hagamos un poco de memoria, el suceso más relevante en términos de mercados a nivel mundial hasta hoy visto, ha sido la caída de la Bolsa de Valores de Nueva York el jueves 24 de octubre de 1929. Su origen se debió al crecimiento acelerado en EUA durante la 1a Guerra Mundial y en respuesta a la demanda de bienes por parte de los países europeos; dicho crecimiento se frenó cuando concluyó la guerra, ya que Europa vivió una fuerte contracción. Ante esto, los inversionistas detectaron la crisis por venir decidiendo de manera generalizada y abrupta salir de la bolsa llevándola al jueves negro. La caída del mercado de NY inició en 1929 concluyendo en 1932; la pérdida del mercado en 4 años fue -80%. Después de la fuerte caída de varios años, fue hasta 1933 que el mercado comenzó a mostrar resultados positivos.

La segunda caída más severa de los mercados a escala mundial después de 1929 se vivió en 2008, su origen fue EUA, ahora de índole financiero. En esta ocasión los inversionistas salieron de las bolsas del mundo ante la quiebra de bancos norteamericanos, esta crisis bancaria y del sistema financiero pronto se convirtió en una crisis económica, ya que el aparato financiero impediría mantener el crecimiento de EUA y en consecuencia del mundo. A diferencia de la caída de 1929, en la crisis de 2008 la caída del mercado duró aproximadamente 18 meses, tocando el punto más bajo en febrero de 2009, esta caída representó -50%.

El mundo ha estado plagado de eventos desde la gran depresión de 1929; sin embargo, en los últimos 30 años los eventos no son menores, así se ha comportado el mercado de EUA desde 1990.

Se hace referencia del desempeño del mercado de valores de EUA por ser el más dinámico y representativo a nivel mundial.

En resumen, los eventos negativos en las inversiones pueden llegar a ser sorpresivos, impactantes, frustrantes y hasta aterradores; sin embargo, aún considerando las crisis más severas, la tendencia es crecimiento. Los ajustes (caídas) que se presentan de forma agresiva y abrupta hacen que el inversionista pierda de vista el desempeño de largo plazo, dándole más valor a las caídas de corto plazo, mismas que terminan por recuperarse. En BDR Investment Capital sabemos que no es sencillo soportar las caídas y más cuando  vemos que siguen y siguen, la percepción es que no habrá fondo, por eso es relevante conocer y familiarizarse con el ciclo de la emociones del inversionista para saber cómo actuar.

*BDR INVESTMENT CAPITAL ASESORES EN INVERSIONES INDEPENDIENTES, S.A.P.I. DE C.V., Folio número 30171-001-(15874)- 26/05/2022